EL VALOR DE UNA ALMA PARA JESÚS
"Se puede sentir insignificante, pero Dios mueve el mundo para ti"

13/05/2016

Por:Apóstol Valdemiro Santiago

Materia: Victor Correa

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

                                        El valor de una alma para Jesús Foto: Peter Itaboray

 

En Marcos 9: 14 tenemos la historia de un joven que fue golpeado por un mal espíritu mudo, y Jesús encontró a su padre entre una multitud, hablando de la situación del niño. Jesús se acerca a ellos para preguntar acerca de la razón, pero que ya sabía.

Jesús usted y todas sus preocupaciones sabe. Ni su esposa y sus hijos saben. ¿Cuántas veces han angustiado sobre algunas situaciones, no le dijo a cualquier persona sensible, sin amigos, sin familia, recibió una mala noticia y se quedó con usted. ¿Cuántos son los tiempos en que tratan de proteger a las personas que amamos y que no quieren que se les diga nuestras preocupaciones. Pero Jesús es el único que sabe.

Ese público ya estaba tomado por sorpresa con la llegada de Jesús, que sólo era acabar con la desesperación de esa familia, al igual que ocurrió en la entrada de Jesús en Nain, que no era una multitud, que era sólo la vida de una viuda y su hijo.

Una cosa que me sorprende en el Señor, nuestro Dios, es que yo, como un hombre insignificante, ya animé más con la gente que con pocas personas, mientras que el Maestro, hizo poca diferencia entre predicar a una multitud como a pocas personas. Que no se ve como humillar al número de personas con las que predicaba. La razón que le llevó por todas partes era el estado de las personas que lo necesitan, como la familia de este joven que, en Marcos 9, se muestra endemoniado.

Jesús vino caminando por el desierto solo acaba de encontrar un solo problema Samaritana, una persona sin mucha expresión que necesita este encuentro con Él. Jesús estaba allí porque quería dar un sentido a su vida, sólo un alma, pero que tiene tanto valor y importancia a Dios y trabajar para Dios, que debe tener el mismo sentimiento, ya sea uno, diez o mil almas. Es la cantidad de personas que están tratando con el mismo amor.

La palabra sorpresa fue lo que cada palabra motivado. Jesús no anunció que iría a esa ciudad, era sólo por la vida de padre e hijo que poseía. Que el padre estaba en el borde, con su alma de explotar, sofocado. He encontrado muchas personas que viven esta lucha, en la vida económica, la familia, la salud, las drogas.

Ver el niño como el que perjudicó el alma del padre, el dolor era tan grande que se elevó a la depresión que conduce a la muerte, sólo Dios la curación.
Que el hombre, en la desesperación, debería haber buscado muchas puertas, especialistas, medicina, intentado muchas soluciones posibles para acabar con el mal de su hijo. El muchacho estaba languideciendo y el padre preguntó a los discípulos de Jesús para expulsar a ese espíritu, el padre sabía lo judiava hijo. Muchos médicos, incluso también en cuenta sus límites y el origen del mal que aqueja a algunas personas, por lo que envían la mayor cantidad de pacientes que reciben el impacto aquí en la iglesia.

Jesús dijo a los discípulos necesitaban tener más autoridad y la fe y luego se llama el muchacho. También tenemos que tener. Ese chico fue afligido desde la infancia, mucho tiempo. Hay tantas personas que sufren demasiado tiempo. A pesar de que su padre tenía la esperanza, ya no tenía la fe infalible. Hay dos maneras para ser bendecidos, a través de la fe y la obediencia. Este hombre fue por la obediencia, dispuesto a hacer lo enviaría a Jesús. Cuando la Biblia habla de la compasión que era, ya no era la fe. Ese hombre tenía la compasión de Jesús.

El diablo sugiere que usted está solo, sin protección, se tiene que sufrir, pero no es cierto que no hay manera. Dios tiene tanto amor, da mucho valor a su vida, si es necesario, mueva con todo el mundo, sólo para llegar a usted. Debido a Elías no llovió y luego, debido a la viuda, llovió. Hay que tomar medidas y obedecer. Si su fe no es fuerte, obedecer.

El demonio trató de matar a su hijo y el padre obligado a cuidar del niño, no podía trabajar, cuidar de otras cosas, obtener su dinero. Pero su vida cambió en el encuentro con Jesús, porque él, a pesar de que se debilitó en la fe, la compasión de Jesús revela que hubo un cambio en su vida. El grado de dificultad en la vida de ese joven era tan grande que incluso los discípulos podrían ayudar, lo último era Jesús.

Cuando el demonio vio a Jesús, lanzó el cuerpo del niño en el suelo. Jesús reprendió al espíritu maligno. Después de eso, el padre tenía la paz y la seguridad, porque sabía que el Maestro había generado la paz. Tenemos que tener en que la seguridad del Evangelio en nuestra vida, a vivir bajo la promesa de Dios.